Bicicleta para el frío ¿Cómo prepalarla y qué debemos tener en cuenta?

La puesta a punto de la bicicleta para el frío es algo que, a menudo, los ciclistas no tienen en cuenta y es muy importante para el funcionamiento óptimo de nuestra “máquina”. Por ello, os dejamos a continuación algunos consejos para aquellos y aquellas valientes que no acaban temporada en noviembre.

Cómo preparar mi bicicleta para el frío

Cuando montamos en bicicleta y las condiciones meteorológicas son adversas, nos solemos encontrar con terrenos más embarrados o resbaladizos que de costumbre. Estas condiciones aceleran el desgaste de la gran mayoría de los componentes de la bicicleta y por este motivo, se recomienda realizar un mantenimiento más recurrente en los meses de invierno. Pero, ¿Cuáles son los elementos que debemos tener más en cuenta cuando llega el frío?

Limpieza y mantenimiento

Es quizá el consejo más sencillo o menos técnico que os vamos a dar, pero nos atravemos a afirmar que se trata del más importante. Es clave realizar un lavado de bicicleta periódico durante todas las épocas del año, pero más aún en meses en los que debe estar preparada nuestra bicicleta para el frío.

El agua y el lodo son dos elementos que pueden filtrarse casi por cualquier punto de nuestra bicicleta, com por ejemplo por los rodamientos, y pueden oxidar fácilmente la cadena y el cassete. También es muy recomendable secar la bicicleta antes de guardarla, pues de lo contrario tu sistema de transmisión se puede deteriorar mucho más rápido. Por último, para preparar correctamente tu bicicleta para el frío hay que desengrasar juego e interior del tubo de dirección, rodamientos del padelier e cables de freno más frecuentemente de lo habitual. Luego, aplicar de nuevo grasa, y si puede ser un spray protector impermeable a todos estos elementos como por ejemplo este de Muc-off.

¿Qué debes revisar de las ruedas de tu bicicleta para el frío?

ATENCIÓN, SI NO LLEVAS UNAS TANNUS ESTE PUNTO ES MUY IMPORTANTE

SI LAS LLEVAS, ENHORABUENA TIENES UNAS RUEDAS QUE NO NECESITAN MANTENIMIENTO

Las ruedas de la bicicleta son, o deberían ser, el único punto de contacto entre tu bicicleta y el suelo. Por ello, son uno de los puntos más importantes a tener en cuenta especialmente cuando el terreno es más complicado. Juegan un papel fundamental en términos de rendimiento, seguridad y tracción.

Con la llegada de las temperaturas más frías, las gomas de las cubiertas se endurecen y disminuyen la adherencia al suelo. Además es más probable que tengas un pinchazo en invierno y mucho más desagradable tener que repararlo en ruta. Por eso, recomendamos rodar con cubiertas sólidas en carretera 100% antipinchazos o añadir un protector antipinchazos para bicicletas MTB.

¿Qué accesorios debes llevar?

Una vez hemos revisado los componentes más importantes de nuestra bicicleta y ya la tenemos lista, debemos fijarnos en nosotros mismos. Idealmente, debemos vestir con ropa que abrigue e impermeable pero que deje transpirar a tu cuerpo de forma natural. Guantes y calcetines son quizá los elementos más importantes ya que abrigan las dos partes del cuerpo por las que se pierde temperatura más rápidamente.

También es muy recomendable incorporar algunas luces o reflectantes extra, pues en invierno hay muchas menos horas de luz.